O livro "Hitler ganó la guerra" do argentino Walter Graziano, consultor económico, nascido em 1960, que recebeu bolsas de estudo do governo italiano e do FMI, livro publicado em 2004, é uma das obras que denuncia as manobras criminosas da elite de poder que governa o mundo. Entre outras coisas, denuncia que o derrube das torres gémeas em Nova Iorque, em 11 de Setembro de 2001 não foi causado pelo impacto dos aviões - o que seria fisicamente impossivel - mas por um sistema de potentes explosivos colocados no interior das torres por agentes dos serviços secretos. E para quê? Para vitimizar os EUA e dar ao governo de Bush legitimidade para lançar guerras em países com ou perto de fontes de petróleo. Ao que parece, já é difícil encontrar este livro nas livrarias, uma vez que a «mão invisível» da censura global pressiona livreiros a não o vender.
O GENOCÍDIO DO RUANDA EM 1994 VISOU QUE OS EUA OBTIVESSEM O MANGANÉSIO E O COBALTO DO ZAIRE
Segundo Graziano, a administração Clinton (1993-2001), que passa por ter sido «progressista» de «centro-esquerda» estimulou a matança do Uganda, impedindo o envio de capacetes azuis, a fim de que a etnia hutu controlasse o país e promovesse um golpe de Estado no Zaire favorecendo os EUA na vontade de estes se apropriarem de minérios raros.
«Son muchos los actos atroces cometidos por la administración Clinton que han pasado inadvertidos o fueron "lavados" por los medios de prensa. (...) En 1994 se comete en el mundo uno de los peores genocidios de la historia. Entre medio millón y ochocientos mil ruandeses son asesinados por sus proprios compatriotas. (...) La nota también menciona que las tropas de paz de la ONU, conducidas por el general canadense Romero Dallaire, habían hecho un desesperado pedido a las Naciones Unidas para que enviaran un refuerzo de sólo 3.000 cascos azules para prevenir una matanza a gran escala prácticamente "cantada". Sorpresivamente, Clinton y su embajadora en las Naciones Unidas, Madeleine Albright, no solo bloquearon la posibilidad de enviar tropas, sino que Albright es citada como que "ponía obstáculos a cada paso" . El genoicídio, a punta de cuchillo, tuvo lugar ante la propria mirada de los 2.000 soldados que Dallaire conducía en Ruanda, que nada pudieron hacer.
¿Cual fue el uso de tal matanza a gran escala? Yas-Lengi Ngami lo narra con claridad en su obra Genocide in the Congo (Zaire). Ngemi cuenta que una vez ocurrída la matanza, tanto Ruanda como sus vecinos Uganda y Burundi comenzaron a estar controlados por una misma tribu: los hutu. Los tres países, gobernados por dirigentes amigos y radicalmente afines, produjeron un golpe de Estado en Zaire, ocupando, sus tropas mancomunadas, parte de su territorio. ¿ Por qué tanto interés por Zaire al punto de permitir pasivamente un previo genoicidio en Ruanda? Ngemi lo aclara rápidamente: no se trata de otra cosa que las riquezas mineras de Zaire, entre ellas, dos minerales considerados estratégicos para la industria de armamento de EE.UU: el manganeso y el cobalto.»
(Walter Graziano, Hitler ganó la guerra, Editorial Sudamericana, 5ª Edición, Junio de 2004, pág. 136-137)
Assim, o mesmo instinto genoicida que presidiu ao lançamento da 2ª guerra mundial pelo partido de Hitler, apoiado financeiramente por Prescot Sheldon Bush, pai de George Bush (pai) e presidente do Union Banking Corporation, foi fautor da campanha de destruição dos camponeses na Ucrânia pelo partido de Stalin em 1932-1933, e está presente em Bill Clinton, em George Bush e na oligarquia que domina os Estados Unidos da América do Norte.
OS INTELECTUAIS FINANCIADOS E CONTAMINADOS PELA ELITE
A elite norte-americana e britânica do megacapitalismo manipula os mais famosos intelectuais - biólogos, escritores, filósofos políticos, etc. A filosofia institucional não é neutra: não é por acaso que filósofos e cientistas de segunda e terceira categoria (Karl Popper,T.S. Khun, Simon Blackburn, Nigel Warburton, Peter Singer, etc) são elevados à ribalta dos foruns televisivos, às cátedras, às montras das livrarias em publicações. Não é por acaso que a filosofia analítica, inócua, inodora, abstracta, visão mutilada do universo, se torna corrente dominante no mundo universitário e jornalístico dos globalizadores.
O Council on Foreing Relations ( CFR) criado em Nova Iorque e composto por cerca de 3000 membros (jornalistas, políticos, economistas, filósofos, militares, pedagogos) é uma instituição, presidida por David Rockefeller, para promover a globalização e permitir às grandes empresas instalar-se em qualquer parte do mundo sem oposição. Escreve Graziano:
«Esta manipulación de los intelectuales y de la ciencia por parte de la elite anglo-norteamericana y del CFR no se reduce a la economía (como advertimos en el primer capítulo) a la historia y la geopolítica (como hemos visto con Brzezinski, Fukuyama e Huntington), sino que invade prácticamente todas las areas de la ciencia. (...)
«Frente al proyecto globalista del "nuevo orden mundial" los escritores que accedieron a la información tuvieron posturas a favor y en contra. Aldous Huxley, H.G.Wells, G. Bernard Shaw, George Orwell, entre muchos otros, se referieron en forma simbólica y alegórica en muchos de sus escritos al proyecto de la elite, el que, sin embargo, temían revelar abiertamente. (...) Huxley colaboró durante toda su vida con uno de los mayores historiadores del siglo XX: Arnold Toynbee, autor de la obra en veinte volúmenes Historia de la Civilización Occidental. Toynbee, miembro de la sociedad hermana del CFR, el RIIA, es un continuista de la historia, pensaba que toda civilización en la historia había comenzado un inexorable declive muy poco después de haber alcanzado su máxino esplendor, y poco después de haber estado a punto de alcanzar una fase "global". La elite anglonorteamericana, verdadera conocedora de este concepto de Toynbee, estaría buscando lo mismo que Roma, Napoleón, el Egipto antiguo y la corona britànica habrían intentado lograr, para luego fracasar. La diferencia, ahora, sería que, con el actual desarrollo de la ciencia y la tecnología, el mundo es más "pequeño" y la posibilidad de globalizarlo en un esquema petrificado y sin cambios, en lo posible perpetuo, es para la elite no sólo posible sino también mucho más probable y deseable.»
(Walter Graziano, Hitler ganó la guerra, Editorial Sudamericana, 5ª Edición, Junio de 2004, pág. 163-164)
«Cuando Fukuyama, durante la presidencia de Bush padre, hablaba del final de la historia, en realidad se refería a un estadio del capitalismo, que deseaba como permanente, por medio del cual las corporaciones ejercerían realmente el poder en la Tierra y los Estados nacionales quedarían reducidos a simples carcasas, referencias semivacías de contenido. En un mundo de estas características, existirían solamente dos clases sociales, la que controla y dirige las corporaciones y la que trabaja para ellas. La agenda antes comentada acerca de los fines de la Comisión Trilateral es una expresión de ésta.»
(Walter Graziano, Hitler ganó la guerra, Editorial Sudamericana, 5ª Edición, Junio de 2004, pág. 166).
Diversos ramos da Maçonaria mundial - já lá vai o tempo em que a maçonaria era, globalmente, uma força progressista anticolonialista e democrática- estão imersos nesta operação de globalização colonialista, atentatória das liberdades individuais e da liberdade de cada povo, construção de uma gigantesca gaiola que aprisionará os cidadãos do mundo inteiro..
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